"NO SOMOS UNA GENERACIÓN PERDIDA"



Este es el grito de un grupo de jóvenes que forman parte de la llamada generación perdida: la mejor preparada de la historia de nuestro país y, al mismo tiempo, la que esta sufriendo una precarización laboral más dura. Una invitación a la esperanza, a recuperar la fraternidad, a trabajar por el bien común, a combatir el individualismo y la indiferencia.


EL PELIGROSO RESURGIR DE LA CARIDAD

(ATTAC España, 27/12/2012)


Carlos Martínez – ATTAC Andalucía

Estamos en la celebración cristiana del solsticio de invierno o Navidad, ahora para católicos y protestantes y dentro de quince días les tocará el turno a los ortodoxos griegos y rusos. Pero no es esto, ni el perder una línea en comentar el discurso del monarca impuesto por el dictador Franco a los pueblos del estado español, lo que me mueve a escribir hoy 25 de diciembre de 2012, no.

Estamos viviendo, ante los recortes de servicios públicos y el empobrecimiento de la mayor parte de las clases populares, los índices masivos de paro y los desahucios o el incremento de personas que sufren hambre, el nacimiento de la receta de la derecha y los medios de comunicación a sus órdenes que son TODOS sin excepción: La caridad.

Ante la congelación de las pensiones, los millones de personas sin prestaciones, la ausencia de las pagas extras de navidad y la pobreza extensa castigada por los copagos sanitarios y las privatizaciones, una nueva formula de los ultra-liberales y neoliberales que nos dominan tal cual es activar la caridad, mediante donaciones de juguetes, comida no perecedera, comedores "sociales", colectas e imágenes de parados y jubiladas celebrando algún premio de la lotería.

La perversión criminal del sistema genocida que sufrimos tiene ya un remedio a sus recortes y abusos, la caridad. Los mandatarios del PP, pero no solo, organizan colectas como en la Diputación de Granada, presidida por un neo-falangista que se dedica a despedir a trabajadoras y trabajadores de servicios sociales, al tiempo que organiza, su institución, sí, una recolecta de juguetes para niños pobres. Tal vez el año que viene volvamos a ver la campaña de los años cincuenta y sesenta de "siente un pobre en su mesa" perfectamente denunciada en una de las mejores películas de cine español, "Plácido".

Volvemos a la España fría  gris y triste de los años sesenta, incluido el autoritarismo y la hipocresía de la burguesía y las clases medias altas. Volvemos a la Campaña de Navidad y Reyes de la OJE (la organización juvenil franco-falangista). Volvemos a campañas de radio en favor de caritativas monjas y las damas de los roperos. Vivimos unas navidades perfectamente neo-franquistas, rematadas con el mensaje de su patético heredero.

Frente a eso: Dignidad, lucha social y movilización frente a los recortes, las estafas y los robos del poder y de las clases ricas y poderosas, que son las que provocan nuestra pobreza y nos arrojan al paro.

Hemos de denunciar y hacer público nuestro desdén por la caridad navideña, antes de que esta se imponga. Hemos de denunciar a abnegados y caritativos burgueses que reparten sus sobras, a la sopa de los conventos o a abnegados voluntarios y voluntarias de clase media que suplen a miles de trabajadores y trabajadoras despedidos de los servicios públicos y las ONGs que se prestan a ello.

Hemos de volver a conquistar nuestros derechos ante el asesinato del bienestar y decir alto y claro que hay una forma diferente de organizar la vida, hacer política y repartir. Hemos de luchar frente a la caridad y por la dignidad. No queremos limosnas, solo lo que es nuestro. Socialismo o barbarie. Justicia o hipocresía burguesa.

EUROPA YA NO ES DEMOCRÁTICA. EUROPA O EL SUPERMERCADO DECADENTE

(ATTAC España, 25/12/2012)


Carlos Martínez – Presidente de ATTAC Andalucía

La Unión Europea es una construcción neoliberal. El objetivo europeo, desde el punto de vista de la Unión, es favorecer sus mercados, sus bancos privados, sus empresas transnacionales, y hacer negocio con lo que fueran sus estados del bienestar.

La Europa de la Unión está gobernada por un colegio de comisarios y comisarias fieles tan solo a los poderes financieros y a los que no puede controlar ningún parlamento. Estos comisarios/as, nombrados a propuesta de sus Gobiernos, solo tienen la función de privatizar lo público, impedir que los estados puedan ayudar a sus tejidos económicos públicos o salvar sectores nacionales estratégicos y comarcas en peligro. Los comisarios son eso: comisarios políticos de la ideología neoliberal, comenzando por el español Joaquín Almunia, que el lunes 16 de diciembre instaba a recortar más, eso sí con un cinismo socioliberal impresentable, y proponía hacerlo "contando con la gente". Su objetivo –el del colegio de comisarios- es garantizar la destrucción de todo lo social y de todo lo que sea de propiedad colectiva o protección social, instaurando el negocio privado en lo que fueron servicios públicos. Cerrando durante años los astilleros, las siderurgias, las minas o las industriales nacionalizadas; con una Europa casi sin industrias, excepto Alemania y algún estado más, han convertido al viejo continente en un parque temático y un centro de especulación financiera. Pero ya ni eso comienza a funcionar. Sin base industrial, sin ideas nuevas de economía verde y sostenible, sin soberanía alimentaria, sin investigación.

Pero todo lo enumerado, que es el origen de la actual decadencia y crisis europea financiera, económica, social y política, no es fruto del fracaso de las hipotecas basura. Es fruto de años de legislar un acervo comunitario de leyes confusas, difíciles de interpretar, profundamente crípticas al objeto de ser ininteligibles, con el solo objetivo de crear un mercado -que no un ente político supranacional-, una dictadura cuasi continental de banqueros, financieros, grandes empresarios y ricos caraduras evasores fiscales. Todo un engranaje de burócratas y técnicos muy bien pagados al objeto de imponer una ideología, una sola: la del negocio de los poderosos.

Este continente ha sido arruinado por brokers sin escrúpulos, directivos financieros mafiosos y un puñado de corruptos y de malversadores; eso sí, magníficamente bien pagados y que siguen conservando sus puestos de trabajo y sus privilegios, a pesar de ser los culpables de tantas quiebras, desgracias, padecimientos y sufrimientos de personas arrojadas al paro, la pobreza y sin futuro o con empleos precarios, sueldos mínimos y sin derechos sociales, sindicales, laborales o humanos. Esta es la Europa que ese colegio de comisarios, burócratas, lobistas y también ministras y ministros de economía, presidentes de Gobierno o primeros ministros -tanto liberales, como conservadores, socialdemócratas o demócrata-cristianos- han construido. Porque la gestación de esta Europa decadente y anti popular arrancó hace décadas. Este tinglado no lo han montado en cinco años. No. Lo han hecho en décadas.

Cuando los pueblos han reaccionado, como hicieron tanto franceses como holandeses rechazando la mal llamada Constitución Europea, -en realidad un tratado comercial-, se les escamoteó su voluntad y se sustituyó la constitución derrotada por un tratado internacional que, además, nunca fue votado en ningún estado miembro excepto en el caso de Irlanda, que lo rechazó y de nuevo se le obligó a votar para que el pueblo irlandés fuera nuevamente colonizado y ahora sufra una aguda crisis, solventada a base de esquilmar a sus gentes, tras sufrir un chantaje que tan solo el servilismo católico de muchos de sus habitantes puede explicar, en un país europeo en el que el aborto sigue siendo ilegal.

Europa, cuyas potencias más agresivas bombardean a otros pueblos para imponerles su "democracia" a tiros, está gobernada por un grupo de burócratas sin control democrático y por un Parlamento sin competencias. Un Parlamento carísimo e inútil que se dedica a definir qué es el chocolate, pero que no impide las agresiones que sufren los pueblos de Europa o la creciente falta de libertades, o ni siquiera puede apoyar a pueblos controlados por gobiernos corruptos de origen mafioso de muchos de sus recientes miembros.

Esa es, entre otras lindezas, la Europa que nos han construido y que entre todas y todos pagamos de nuestros bolsillos. Esa es la Europa destructora de las conquistas de las clases obreras vencedoras del fascismo, que no tiene otro objetivo que "chinizar" a las clases trabajadoras al objeto de competir en el nuevo mundo que emerge a su pesar y haciendo justo lo contrario.

Por eso hay que decir basta ya. Los pueblos de Europa no podemos seguir callando. Los sindicatos actuales, leve sombra de los que con sus mismas siglas conquistaron el bienestar, no pueden decir a sus afiliadas y afiliados que solo haciendo manifestaciones contra las políticas de austeridad vamos a volver al pacto social. La férrea voluntad de las oligarquías europeas es aniquilar todas las conquistas sociales y punto. Nada volverá a ser igual. Por eso, si los resistentes, los rebeldes y las indignadas, los obreros y las trabajadoras dignas, los sindicatos de clase y los movimientos triunfamos sobre la dictadura mercantil que nos roba y oprime -y lo haremos- deberemos construir algo nuevo. Deberemos inventar una nueva sociedad justa y solidaria. Conquistar la democracia plena, lo que incluye la democracia económica.

La Alter Summit o Cumbre Alternativa, lanzada en el Foro Social de Florencia que recientemente ha tenido lugar en la ciudad toscana, surge como una alianza de sindicatos, movimientos sociales y redes de economía crítica. Busca la coordinación de las luchas, establecer puentes con las Confederación Europea de Sindicatos, pero también con las redes y foros sociales y los movimientos cívicos, así como con las redes de pensamiento y acción critica. La Alter Summit denuncia la austeridad tan nociva que sufrimos, pero también denuncia la estafa de la deuda, exige su auditoria y moratoria, el impago de la deuda ilegitima y defiende un modelo de banca pública y democráticamente controlada, lo que incluye al otro gran núcleo de poder totalitario que sufrimos: el Banco Central Europeo que, alimentado con fondos públicos del IVA que pagamos, los presta a los bancos privados al 1% para que estos hagan negocio a su vez con los estados cobrando no menos de un 4%; lo cual es no solo un atraco gigantesco, sino una burla democrática y un genocidio social contra las clases populares.

Las izquierdas europeas son débiles todavía. La gigantesca UE de 27 estados, muchos de ellos antiguas repúblicas que sufrieron el estalinismo, son ahora feudos conservadores, ultranacionalistas, derechistas y corruptos que garantizan una mayoría conservadora a pesar del empobrecimiento de sus pueblos y la liquidación de los servicios públicos que la mayoría padecen. La mayoría derechista y reaccionaria está garantizada. Hasta en eso han hecho trampa los constructores de la UE y la socialdemocracia ha sido cómplice imprescindible de todo este ataque a la soberanía popular, y también nacional, de los pueblos de Europa.

Los partidos de izquierdas no están en condiciones de cambiar esto a nivel continental, excepto que las izquierdas pudieran vencer por medio de alianzas convergentes democráticas y transformadoras en Grecia, Portugal y España -o al menos en dos de esos estados- y ello permitiera una política diferente, garantizada por la alianza del resto de los pueblos a través de sus movimientos y sindicatos. También sus minorías de izquierdas. Pero mientras sí o no, los pueblos debemos alzarnos y mediante huelgas generales y luchas sociales, manifestaciones masivas y ocupaciones, impedir la consumación del modelo dickensiano de explotación que nos están construyendo.

No nos sobra el tiempo ya. Las normas de liberalización y desregulación avanzan imparables, la próxima será, atentos y atentas: La Unión Fiscal y Económica Europea. No olvidemos este confuso y falso nombre de lo que es una vuelta de tuerca más contra las soberanías nacionales y populares mediante la reforma, es decir el cambio de todas las leyes y normas de protección social y la privatización masiva. Estas normas ponen el pago de la deuda, impagable tal y como llevamos tiempo advirtiendo, por encima de cualquier derecho social. Pero esto en el Estado Español nos suena. Lo estamos viviendo ya, sin embargo todavía será peor. Portugal, Grecia, Italia y el Reino de España, somos la avanzada y el laboratorio.

Por todo esto, la exigencia de frenar la Europa neoliberal debe estar en nuestras agendas. Las alternativas frente a estas políticas existen. Pero que nadie se engañe: vivimos una lucha exclusivamente política. El neoliberalismo es político y la resistencia al mismo también. La UE es un arma política contra sus pueblos, y no reconocerlo es tontería, es perder el tiempo, es confundir o es ser cómplice. Podemos estar a favor de Europa, pero no de esta Europa y por desgracia no hay otra. Luego la unidad, la solidaridad y la acción conjunta por parte de todas y todos son imprescindibles. El sectarismo es traidor y los deseos hegemonistas en el seno de las izquierdas, suicidas. Es momento de cumbres de lucha social. Son necesarios los frentes de salvación y las convergencias antineoliberales. El neoliberalismo es el nuevo fascismo totalitario que recorre y esclaviza Europa, que vive una guerra de clases sin cuartel. Los análisis ya están hechos. Sabemos las causas y tenemos las alternativas. Dejemos de discutir y salgamos a ocupar las calles, a luchar contra el nuevo fascismo, a defender la democracia y el derecho a una vida digna y justa. Al reparto.

La Alter Summit puede ser una buena herramienta. Juntemos las herramientas y digamos alto claro que nosotros somos el pueblo. Construyamos la alternativa convergente y además sabemos lo que hace falta para hacerlo y como hacerlo.

DESEOS A FINALES DE AÑO



Antonio AramayonaProfesor de filosofía

Acabaron, de momento, los villancicos, las comidas y las cenas en familia. Ya ha acontecido el solsticio de invierno, una celebración nacida en el albor del Homo Sapiens, que las distintas culturas y religiones, incluido el judeocristianismo, han ido anexionándose como festividades originarias propias, pero que hunden sus raíces en el afán del ser humano por comprender y festejar la vida y el mundo que le rodea.Hoy es el último miércoles y mi último artículo del año, en dieciocho años de colaboración ininterrumpida en este diario. Quiero acabar el año deseándote cosas hermosas y valiosas para tu presente y tu futuro.

DESEO QUE SEAS siempre el dueño de cuanto tienes y posees, pues así quedará claro quién es dueño de quién, si tú del dinero, o el dinero de tu vida. Deseo que tu vida limite solo con la libertad y el bienestar de los demás, sin los que no te sea posible tu propio bienestar.

Deseo que seas dueño de tu vida y de tu muerte, que siempre las quieras dignas, que nunca abras la puerta a quienes pretenden enseñorearse dogmáticamente de tu vida y del final de tu vida.

Deseo que te equivoques de vez en cuando, pues eso es señal de que buscas siempre e intentas ir por el camino de la coherencia; también que no te importe arriesgar para conseguir lo que anhelas y que no traiciones lo que quieres y lo que debes.

Deseo que el PSOE salga de su modorra; los sindicatos, de sus despachos; el PP, de su política de demolición del estado del bienestar y de los derechos básicos de la ciudadanía. Y que a ti todo te parezca poco para hacer que otro mundo sea posible.

Deseo que el pueblo se levante contra sus depredadores: son poderosos y fuertes, pero es hora ya de hacer realidad el grito de que el pueblo unido jamás será vencido.

Deseo que se lleve a cabo una auditoría a los verdaderos responsables de la crisis, que los jueces impartan verdadera justicia sobre todo por ser personas justas, que sean encarcelados los culpables, que el indulto deje de ser patente de corso gubernamental para beneficiar al poderoso y a sus lacayos.

Deseo políticos valientes, que se atrevan a parar los pies a tantos carroñeros que viven de los beneficios obtenidos mediante el dolor, la desventura y el sufrimiento del pueblo. Deseo que paguen impuestos los que más tienen en consonancia con sus ingresos y sus posesiones. También la abolición de la nobleza, la devolución al pueblo de las posesiones de los grandes terratenientes.

Deseo la desaparición inmediata de la lacerante antigualla del Concordato de 1953, así como de los Acuerdos de 1979, ente Iglesia católica y Estado español, que incluyen tantas cláusulas preconstitucionales y anticonstitucionales. Deseo que la Iglesia pague impuestos como cualquier hijo de vecino, sin escudarse en la labor social de Cáritas, financiada en su mayor parte con donativos privados y con los impuestos de todos.

Deseo que los espacios y los actos públicos, de toda la ciudadanía, sean realmente aconfesionales; que mi alcalde, el de Zaragoza, caiga del caballo de la obcecación, el personalismo y la soberbia en este ámbito.

Deseo que ningún enfermo sufra innecesariamente, que los cuidados médicos palien en lo posible su dolencia, que todos y cada uno tengamos acceso por igual y en igualdad de condiciones a una atención sanitaria personal, pública y de calidad.

Deseo que el alumnado no se aburra en clase, a la vez que aprende, atiende, entiende y asimila lo que recibe y comparte en el aula. Deseo que el profesorado sea siempre consciente del maravilloso privilegio de encender cada día la llama de la inquietud y la aventura del saber en su alumnado.

Deseo que el ministro Wert sea por fin consciente de ser ministro de Cultura y Educación, y no solo ni principalmente ministro del PP.

Deseo dirigentes que duden, políticos que duden, profesores que duden, jueces que duden, empresarios que duden, intelectuales que duden, trabajadores que duden, policías que duden, pues solo entonces serán capaces de descubrir y repartir certezas.

DESEO QUE VIVAS cada momento de tu vida como si fuera el último, para hallar así el tesoro de los colores, olores, sabores, contactos y sonidos que regala. Deseo que tu corazón lata siempre encendido, que te sientas millonario en cariño, amistad y afecto: así sabrás que al final de la vida cuenta sobre todo cuántos y cuánto hemos querido y nos han querido.

Deseo tierra para todos, y que sus frutos sean de todos y para todos. Deseo que dejemos de esquilmar y ensuciar la Tierra.

Deseo para ti y para todos, especialmente para los lectores de este artículo y este diario, generosidad, arrojo y empeño suficientes para hacer que cada día el mundo sea mejor.

EL RUMBO DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO

(ATTAC España, 22/12/2012)


Carlos Berzosa – Consejo Científico de ATTAC España
Las navidades de este año llegan más tristes y austeras que las que han tenido lugar en los últimos tiempos, aunque hubiera crisis. Mientras esto es así, el Presidente de Gobierno declara ni más ni menos lo siguiente: "Estoy satisfecho con el rumbo que hemos marcado". La verdad es que cuando leí esta afirmación, no me lo podía creer, y pensé que ante tanta insensatez que hay que escuchar día tras día a los miembros del Gobierno y a otros dirigentes del PP, ya se me había embotado la mente, después de ser atormentado por tantas simplezas y engaños, que ya leía lo que no era. Pero no, lo he leído y releído en varios medios de comunicación, y resulta que sí dijo lo que acabo de citar. Mi perplejidad es máxima.
¿De qué se encuentra satisfecho el presidente? ¿De que aumente el número de parados? ¿De que los ERE estén a la orden del día? ¿De que aumente la desigualdad y la pobreza? ¿De que se recorten los derechos sociales? ¿De que se acabe con la Educación y la Sanidad pública? ¿De que se cercene a la investigación?¿ De que se recorte la ayuda al desarrollo y la destinada a la acogida de los refugiados? En fin, tantas cosas se están viniendo abajo, que el rumbo del presidente, del que se encuentra tan satisfecho, no es otro que el que retrocedamos unos cuántos años en el bienestar y derechos logrados. A lo mejor es de eso de lo que se trata. En suma, trabajar más horas por menos sueldos, tener menos vacaciones, pagar por el uso de los servicios públicos y de esta manera igualarnos a los países emergentes asiáticos en las condiciones laborales y de derechos para ser más competitivos. Esto es de lo que se trata ser más competitivos, para que unos cuantos se enriquezcan y mientras el resto vivamos peor.

El rumbo marcado no es otro que hacer que la sociedad española sea más pobre económicamente pero también en conocimientos, cultura, solidaridad y sostenibilidad. Una economía más injusta y desigual en rentas, riqueza, de género, oportunidades y derechos. Al tiempo que los gobernantes parecen vivir en una burbuja de cristal, dando la impresión de que se encuentran en una esfera distinta a la de la realidad cotidiana de la mayoría de la gente, los ciudadanos de todos los sectores y colores ideológicos, se rebelan contra la política económica y social practicada. No sé si queda alguien por salir a la calle, pero se está consiguiendo el malestar en todos los ámbitos de la vida social.

Los dirigentes se encuentran impotentes para dar respuesta a las demandas ciudadanas, a la vez que no sólo no son capaces de arreglar en lo más mínimo lo que está sucediendo, sino que lo agravan todo aún más de lo que estaba. La ineficacia es manifiesta. La política, basada en la mayoría absoluta parlamentaria, se utiliza para vencer pero no para convencer. No es esta la forma de actuar en un sistema democrático. Tratan de acallar las voces disidentes, pretendiendo dominar los medios de comunicación y cambiar la información y la opinión por la propaganda burda con la que nos obsequian en los informativos de la televisión pública. A pesar de ello, los ciudadanos protestan y no comulgan con ruedas de molino.

Todo lo que está sucediendo es el fracaso de las políticas económicas de ajuste y es también el de muchos economistas convencionales que siguen insistiendo en que se siga haciendo lo mismo que hasta ahora, aunque las cosas empeoren en vez de mejorar. Así no solamente se retrocede en tantas cosas como hemos mencionado, sino que no se sale de la crisis, y no se acaba con el déficit público. Las cuentas no se sanean pero aunque se consiguiera, que parece ser que es el único objetivo del presidente del Gobierno, los que quedaríamos sin sanear seremos los mayoría de los ciudadanos que acabaremos no se sabe cómo, pero eso sí, con las cuentas equilibradas. Los Bancos salvados, pero la Educación, Sanidad e Investigación hundidas, entre tantas cosas.

En definitiva, que ante las navidades lo mejor que se puede hacer es disfrutar de la cultura y de la lectura, aunque también cuesta cada vez más dinero. Pero debemos formarnos y seguir leyendo, entre otras cosas, para que no nos engañen. Habitualmente en mis artículos recomiendo libros. Ahora también lo voy a hacer por si les puedo ayudar, o para hacer algún regalo.

Krugman y Stiglitz siempre son una garantía, del primero "Acabad ya con esta crisis" del segundo "El precio de la desigualdad". Uno ameno, provocador y estimulante es el de Varoufakis "El Minotauro global". Para un análisis profundo del funcionamiento del sistema el de Alvater "El fin del capitalismo tal y como lo conocemos". El problema de las deudas es bien tratado por Chesnais en "Las deudas ilegítimas". Entre los españoles Rodríguez Ortiz "Las máscaras de la crisis"; Amparo Estrada (coord..) "Qué hacemos para construir una alternativa con la que mostrar que es posible otra política económica"; de economistas frente a la crisis, "No es economía es ideología"; de Sampedro y Berzosa, "La inflación (al alcance de los ministros)"; y los varios publicados de Navarro, Torres y Garzón. Esto solamente es una muestra de las alternativas y análisis que existen más allá de la economía oficial. Uno muy interesante es el de los Skidelsky, padre e hijo, "¿ Cuánto es suficiente?.Felices navidades austeras y que se lo pasen bien con un buen libro.
Artículo publicado en Fundación Sistema

¿PUEDE HOY LA IZQUIERDA, SI LO ES, ABRAZAR LA PAZ SOCIAL?

(ATTAC España, 20/12/2012)


Antonio Fuertes Esteban – ATTAC Acordem

Estamos constatando día tras día el abismo donde se precipitan en barrena los discursos políticos de la modernidad tardía, sin que por el momento hayan fuerzas políticas o sociales capaces de reformular los parámetros de la misma transcendiéndola – no ya revolucionariamente, sino ni siquiera como reformas que supongan avances para las clases populares – dadas las nuevas circunstancias contra-revolucionarias y regresivas que ha supuesto el re-apoderamiento social del dinero, la dictadura de las finanzas sobre la economía y la sociedad.

La crisis del sistema capitalista, además de una profunda crisis social y ambiental, ha supuesto una crisis de sus instituciones y procedimientos. Esto supone la deslegitimación del ordenamiento político sobre el que se construyó la democracia burguesa, como democracia formal y pretendidamente representativa.

Las organizaciones políticas y sindicales de izquierda, que han tenido un papel decisivo desde la transición en la gobernabilidad del sistema en el Estado español, han perdido sus roles y poderes tradicionales como fuerzas de progreso o cambio. El sistema, como sistema global, venció al cambio posible a través del ordenamiento internacional que posibilitó la globalización financiera y en cuya consolidación tienen responsabilidades gran parte de esta izquierda, por acción u omisión.

Dicho sistema, siempre controlado por la élite plutocrática del dinero, viene efectuando en Europa un ataque a los pactos democráticos de post-guerra desde hace más de tres décadas y con la actual crisis sistémica ha sacado sus garras para dar el golpe definitivo a la democracia. Nadie puede negar hoy que la actual burla democrática oculta la dictadura del dinero por encima de los poderes políticos electos y sobre la ciudadanía.

Las medidas de gobierno fundamentales en el Estado Español – como en buena parte de Europa- se toman hoy a golpe de decretazo, sin importar el rechazo social que suponen. Comenzó el PSOE y el PP está llevando el gobierno por decreto y sin diálogo político o consenso social al paroxismo, argumentando que es la única opción posible ante la presión de los mercados. Todos sabemos que la crisis está significando la excusa para demoler el Estado social y efectuar la re-distribución de las rentas del Trabajo hacia el capital. La llamada dictadura de los mercados tiene nombres y apellidos y es la dictadura de los muy ricos, de los poseedores del dinero, las instituciones financieras internacionales y los grandes accionistas y directivos de las grandes corporaciones transnacionales.

Se espera, de los gobiernos europeos, sean los artífices de la regresión social, del re-apoderamiento de la riqueza en pocas manos y de la extinción de lo público, del Estado social. Esto significa hoy un auténtico golpe de estado a la democracia en Europa, declarado unilateralmente desde las élites económicas y políticas europeas, en aplicación del Tratado neoliberal de Lisboa, que, nunca me cansaré de repetir, fue firmado por los 27 jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea, tanto los del grupo socialista, como del grupo popular.

Ante esta agresión sobre las clases populares, rompiendo la posibilidad de paz y cohesión social, las organizaciones de izquierda no pueden poner la otra mejilla –de la ciudadanía- mediante políticas concertadoras que desconciertan y pactos de manos atadas que hoy tienen como escenario auténticas cámaras de tortura destinadas a la ciudadanía y donde la cuestión que se pone encima de la mesa es "hasta donde nos vamos a bajar los pantalones". La única postura digna posible de las organizaciones de izquierda política y sindical es la defensa del "cinturón de seguridad" que significa el Estado social basado en el garantismo del trabajo y de los servicios y prestaciones públicas para la ciudadanía, ¡Ni un paso atrás!

Un sindicato de clase hoy habría de tener como eje fundamental de lucha, desde un sindicalismo de clase y no corporativo, presionar por el reparto del trabajo mediante la reducción de la jornada laboral. Desde la política de izquierda no se puede consentir la actual política privatizadora, el desguace de los servicios y prestaciones públicas. Sobre ello no debería haber negociación posible. Los deseos de la oligarquía y de sus siervos políticos de aumentar su poder y beneficios solo tienen una respuesta digna desde la izquierda social y política: El fin de la concertación y de la paz social, la movilización social y la desobediencia civil. En ningún caso las organizaciones pactistas deberían ser, en estos momentos, las que abanderen la lucha de la ciudadanía. Todos tenemos el deber ciudadano de extender socialmente una cultura de rebeldía, desobediencia y propuesta alternativa ¡Basta ya de vergonzosas claudicaciones!

Sin embargo la ciudadanía organizada necesita ya ir más allá de la desnuda rebeldía y más allá de efectuar una política de enfrentamiento y de simple acoso y derribo de los gobiernos. Las organizaciones de izquierda real, junto a movimientos sociales y ciudadanía crítica, ya hace tiempo saben que se ha de pasar de la respuesta a la propuesta, del enfrentamiento a la confrontación de alternativas y de la oposición al programa y todo ello mediante formas organizativas estables en el tiempo. La organización ciudadana ha de formularse basándose en un programa mínimo de consenso como palanca del cambio necesario y que pueda convencer e ilusionar a amplias capas sociales.

Y en este reto ciudadano organizado de proyecto alternativo, organizaciones como ATTAC Acordem y el Frente Ciudadano contra el Poder Financiero quieren colaborar con sus alternativas, enfocando los análisis, propuestas y las movilizaciones directamente a combatir al poder financiero, al causante de la crisis y del ataque a la democracia.

La izquierda que nunca ha movilizado a la ciudadanía contra el poder financiero, que nunca ha planteado social y pedagógicamente un proyecto de finanzas públicas, sociales y éticas, ha de comenzar a plantearlo y a luchar por él, a hacer partícipe de esta lucha a la ciudadanía. No es posible un Estado social sin una hacienda pública solvente, sin una fiscalidad suficiente, justa y re-distributiva, vendiendo al capital privado las empresas y el erario público, sin combatir la especulación financiera e inmobiliaria, sin controlar a la banca, sin promover una banca y servicios financieros públicos, alimentando la deuda ilegítima sin cuestionar cómo se ha generado y cargándola en las espaldas del pueblo.

El debate queda abierto, pero considero que ya no se pueden tener miramientos hacia la oligarquía, ni mucho menos colaborar o co-habitar con ella. La izquierda hoy para serlo ha de ser libre de ataduras. ¡ojo con la financiación! ¡ojo con la co-gestión financiera! El sistema fácilmente engulle a los contrincantes, si estos se dejan ¡claro!

LIBROS CON CAUSA (E INTERÉS) PARA ESTAS NAVIDADES

(3500 Millones, 18/12/2012)


Selma
Selma, la oveja, responde a algunas preguntas


Dice mi mujer que yo regalo libros hasta en los entierros, pero es que encuentro que es el mejor modo de ir sobre seguro. No hay más que ver los sollozos emocionados de amiguetes y cuñados cuando se enteran de que yo soy su 'amigo invisible'. Al fin y al cabo, ¿quién quiere viajes y iPad cuando puede tener un buen libro sobre inmigración o revoluciones africanas? Amigos gafapastas, hagan como yo y no se arredren: @3500M les ofrece sus particulares recomendaciones de libros para las Navidades. Hay para todos los gustos y edades. No todos son novedades y no todos han sido traducidos todavía (atentos, editores), pero cada uno de ellos me ha parecido sobresaliente y pertinente por alguna razón. Espero que a ustedes también les interesen. 

- Antes de escribir su impresionante Las uvas de la ira, en plena Gran Depresión, John Steinbeck publicó en The San Francisco News una serie de reportajes sobre la situación de los inmigrantes (de dentro y fuera) en las explotaciones rurales estadounidenses. Los Libros del Asteriode los recogieron en Los vagabundos de la cosecha, un volumen pequeño e imprescindible en estos tiempos de acoso a los extranjeros en situación irregular. 

- Sobre un tema similar, en Inmigrantes: tu país los necesita (Philippe Legrain, editorial Intermón Oxfam) encontrarán una argumentación legible y contundente sobre los beneficios de un régimen migratorio global mucho más flexible. Muy liberal, pero es que uno tiene sus debilidades.

- Por qué fracasan los países (DEUSTO): Daron Acemoglu y James Robinson se embarcan en la complicada de tarea de explicar porqué unos países salen adelante y otros no. El volumen de moda entre los aficionados al desarrollo. Muy, muy interesante.

- Y, si les interesan las civilizaciones decadentes, les sugiero que le echen un vistazo a Colapso, de Jared Diamond, el autor del recomendabilísimo Armas, gérmenes y acero. Una ilustrativa explicación histórica sobre las razones naturales, climáticas, militares y mercantiles por las que unas sociedades perduran y otras desaparecen.

- Algunos buenos libros sobre desigualdad, un asunto que constituye una absoluta prioridad en el debate público de muchos países (España en primer lugar): además de lo último de Stiglitz (El precio de la desigualdad), les recomiendo Desigualdad, un análisis de la (in)felicidad colectiva, un libro que nos explica porqué las diferencias sociales extremas suponen una estupidez, además de una inmoralidad. Y, si están muy animados, les sugiero dos novedades que están pegando fuerte en EEUU: Plutócratas (de Chrystia Freeland, sobre la dictadura del 1% más rico de nuestras sociedades) y The Haves and the Have Nots, del economista estrella en este campo Branko Milanovic.

- Un acierto seguro: las agudas y desternillantes tiras del New Yorker sobre economía, traducidas y editadas por los Libros del Asteroide: El dinero en The New Yorker.

- Sobre buen periodismo, una de las claves para construir sociedades más transparentes, democraticas y prósperas: La vida de un periodista (del exdirector del Washington Post Ben Bradlee. El País-Aguilar) y The Blood of Brothers (de Stephen Kinzer; la mejor crónica periodística que he leído sobre la revolución nicaragüense, recientemente reeditada tras varios años fuera del mercado).

- En este tiempo de tanta bandera y populismo patriotero, una inyección de sentido común y un relato estremecedor de las consecuencias de la Guerra Civil española, escritos en directo: A sangre y fuego, del imprescindible Chaves Nogales.

- La carretera, de Cormac MacCarthy. Leí este libro el pasado verano y me pareció demoledor. La crónica del viaje que realizan un padre y su hijo en un mundo devastado por un desastre nuclear es una alegoría estremecedora de la carnicería social que provoca la crisis. En medio del caos, la compasión y la ternura de estos dos personajes te reconcilia con el mundo. No se lo pierdan.

Y para la educación y el entretenimiento de los hijos que dejaremos a nuestro mundo, les ofrecemos las recomendaciones que nos hace El Dragón Lector, mi librería infantil de cabecera:

- Un regalo diferente, de Marta Azcona y Rosa Osuna (Kalandraka, 0-3 años): El día de su cumpleaños, Marcel invitó a Tristán a merendar en su casa. -¡Felicidades! –dijo Tristán al ver a su amigo, y Marcel abrió el regalo y le dio un pequeño paquete que contenía... un trozo de tela. Entonces descubrirá todo lo que es posible hacer con un objeto aparentemente inservible.

- Compota de manzana (Ekaré, 3-6 años): "Mi papá es fuerte y tiene manos tibias que saben a compota de manzana. A veces sus manos se enfrían y aparece un papá tormenta: "¡Haz los deberes!, ¡apaga el televisor!". A veces se calla y sus manos dibujan rayos en el cielo. Pero un papá tormentoso no dura mucho". La importancia de las relaciones padre-hijo en este precioso cuento de Klaas Verplancke.

- Veva, de Carmen Kurtz (Noguer, 8-10): Veva es un bebé de nueve meses que decide relatar lo que ha vivido hasta el momento desde su nacimiento. De esta forma reflexiona, se interroga y se maravilla con el mundo adulto, especialmente con los vínculos entre los mayores y los jóvenes. Los pensamientos de Veva se dejan ver, principalmente, en las divertidas conversaciones que mantiene con su abuela. Contado magistralmente en primera persona, Veva divierte al lector con sus ocurrencias y genera una complicidad y ternura que se encuentra más allá de las leyes del tiempo.

- El complot de las flores, de Andrea Ferrari (SM, 10-12): Para nuestros pequeños protoactivistas. La novela está protagonizada por una chica de 14 años llamada Mara, quien, junto a su familia, acaba de mudarse al pueblo desde Buenos Aires. La historia transcurre en Las Flores, un pueblo muy chico y con muy pocos habitantes que corre el riesgo de desaparecer. Un grupo de personas muy preocupadas por este problema, el "Grupo de Rescate", arma un plan misterioso para salvar a Las Flores.

- Llamando a las puertas del cielo, de Jordi Sierra i Fabra (Edebé, más de 12): La historia de Silvia, estudiante de Medicina, que se marcha a la India para trabajar como cooperante durante el verano en un hospital ubicado en uno de los lugares más recónditos del planeta. Un guiño a la vocación de los chavales.

- Selma, de Jutta Bauer (Cuatro Azules, tanto para pequeños como para adultos): una oveja lanera es entrevistada acerca del sentido de la felicidad. Su respuesta merece ser leída.

- Soy feliz, de Jimmy Liao (Barbara Fiore, tanto para pequeños como para adultos): "Desde mi infancia, siempre fui un niño preocupado. Cuando un coche de los bomberos iba hacia donde se encontraba mi casa, enseguida me preocupaba que fuera mi casa la que ardiera. (…) Eran muchas las cosas que me preocupaban, pero descubrí que en realidad no había muchas cosas por las que valiera la pena preocuparse. En cambio, si yo no me preocupaba de nada, de pronto, todo el mundo se preocupaba. En el fondo, en esta vida, tanto si te preocupas como si no, lo cierto es que los demás se van a preocupar…".

Confío en que alguna de estas recomendaciones resulte útil para sus regalos. Si quieren consultar otras muchas sugerencias que hemos hecho en el pasado, pueden hacerlo aquí. Y recuerden que en otras entradas de @3500M estamos recomendando estos días otros muchos regalos sostenibles y solidarios.

GOLPE DE ESTADO FINANCIERO DESDE LA UE

(ATTAC España, 14/12/2012)


Comunicado ante la activación del rescate bancario
Frente Ciudadano contra el Poder Financiero

El rescate a la banca española, con un primer tramo de alrededor de 40.000 millones de euros, comporta la aplicación de las medidas del Memorándum de la Unión Europea en perjuicio de la inmensa mayoría de la población.

LO QUE OCULTA EL RESCATE:
a) La falta absoluta de flujo crediticio para las economías particulares y productivas, que en ningún caso se resolverá con las medidas adoptadas.

b) Con cargo al ejercicio de 2011, el Estado ha asumido pérdidas de más de 11.000 millones de euros por importes incobrables, y  hace pocos días el Banco de Valencia (que había recibido 6.000 millones de ayudas estatales) fue adjudicado por 1 euro a Caixabank. Estos precedentes indican lo que se puede esperar de las entidades recapitalizadas con los 40.000 millones del rescate. Recordemos que 11.000 millones es una cantidad superior a lo que en 2012 ha supuesto el total de los recortes en sanidad, educación y servicios sociales en España.

c) Especialmente sangrante es que con una mínima parte del importe de esta recapitalización se habría podido cubrir la deuda impagada de las familias desahuciadas por las mismas entidades, lo que representa un menosprecio del más mínimo sentido de la justicia.

Por estos motivos DENUNCIAMOS:

1.-La limitación de la soberanía nacional y de la democracia que supone la imposición de esta medida por parte de organismos sin ninguna legitimidad democrática y la aceptación por parte de los gobiernos de España y Cataluña de esta y de otras imposiciones bajo el pretexto de que hay una deuda pública excesiva.

2.-Los 40.000 millones de euros del rescate pasan a engordar la deuda pública, lo que constituye una nueva transferencia de deuda privada a deuda pública, con la consiguiente carga tanto de intereses como de devolución de unas cantidades que resultarán de imposible cobro una vez vendidas las entidades re-privatizadas.

3.-El golpe de gracia que supone, en la práctica, para el modelo financiero de proximidad que representaban las cajas de ahorros y  las obras sociales ligadas a ellas, así como un paso más en el proceso de concentración bancaria que dejará el sistema financiero en manos de seis o siete grupos y, por tanto, en situación prácticamente de oligopolio.

4.-La imposición de un «banco malo» con un 45% de capital público, pero con el aval por parte del Estado de las cantidades destinadas a la compra de los activos y créditos de las entidades hasta un total de 90.000 millones de euros, todo ello con el consiguiente aumento del riesgo asumido y, en el futuro, con el previsible aumento de la deuda pública debido a las pérdidas del banco malo.

5.-La reducción exigida de 10.000 puestos de trabajo, lo que comporta hacer pagar a los trabajadores las responsabilidades de directivos, políticos, organismos reguladores, empresas tasadoras, auditoras y de calificación, etc., que no solo no han asumido sus responsabilidades, sino que en algunas ocasiones –en caso de algunos directivos– se han enriquecido con indemnizaciones y planes de pensiones millonarios.

6.-La imposición de vender las entidades re-capitalizadas, lo que impide la formación de una banca pública potente que asuma la función de dar financiación a la economía real de particulares, autónomos y pymes.

7.-La imposición de pérdidas de más del 40% del dinero invertido en participaciones preferentes, que en la inmensa mayoría de los casos fueron colocadas con engaño a ahorradores sin la información adecuada.

Dado el carácter antidemocrático de las medidas implicadas en el rescate bancario y el Memorándum, PEDIMOS:

I.- La no asunción de la deuda privada por parte del Estado y, por tanto, el impago de la parte de la deuda proveniente de este traspaso. Solo con este impago se obtendrían recursos para parar los recortes y recuperar las prestaciones y los servicios sociales  que se han suprimido.

II.- Que se exijan responsabilidades a todos los actores que han provocado la situación de práctica quiebra del sistema financiero, comenzando por los directivos, los políticos y todas aquellas personas que por acción u omisión la han hecho posible.

III.- Reivindicamos los servicios financieros como servicios sociales y, por tanto, la creación de una banca pública potente con una clara vocación de servicio público y con planteamientos éticos y solidarios.

Hacemos un llamamiento a toda la sociedad, que tendrá que sufrir los recortes por  deudas ajenas, y especialmente a las entidades comprometidas en la lucha contra los abusos bancarios, desde los desahucios hasta las ventas abusivas y otras prácticas indeseables, con el fin de darle la vuelta a esta situación y enfrentarnos conjuntamente contra el poder financiero. Poder que entendemos es el gran responsable de la situación actual, así como de las medidas de liquidación del estado del bienestar que se están produciendo en base a un programa totalmente preestablecido, que poco tiene que ver con la crisis y mucho con el afán de incrementar el rendimiento del gran capital.

Es el poder financiero el principal culpable del debilitamiento de las instituciones democráticas que tendrían que representar los intereses de las clases populares.

El Frente Ciudadano contra el Poder Financiero no pretende multiplicar artificialmente el número de organizaciones que luchan por la justicia. Aspira a catalizar una lucha que ya se está llevando a cabo desde diferentes colectivos y entidades y a reforzarla buscando las sinergias y la cooperación entre todas.

Frente Ciudadano contra el Poder Financiero
e-mail de contacto: coordinacio_frontciutada@googlegroups.com

¡VIVA LA JUANA! CONSTITUCIONALISMO PARA IDEÓLOGOS REACCIONARIOS

(ATTAC España, 14/12/2012)


Juan Carlos Monedero – Consejo Científico de ATTAC España

Como en una suerte de ley histórica, es fácil ver cómo los que se oponen a cualquier avance social, se recuestan una generación después en aquello que combatieron. No por arrepentimiento, sino con la intención de  frenar en el presente nuevos avances. Esto es válido para una ley laboral y también para la incorporación de algún sector a la ciudadanía; vale para la extensión del voto y vale igualmente para la definición como público de un bien. Y, por supuesto, es especialmente adecuado para la aprobación de una Constitución. El poder constituido siempre se ve amenazado por el poder constituyente. Al igual que Frankenstein mata al doctor que lo construyó enfadado por ponerle fecha de caducidad (por hacerlo mortal), lo constituido aborrece de lo constituyente porque puede mandarlo siempre al basurero de la historia. Lo que implica que cada vez que surgen fuerzas sociales que avanzan desarrollando la democracia –desplegando el espíritu, que diría Hegel– hay otros que, recurrentemente, se sitúan enfrente frenándola o, al menos, intentándolo. No hay revolución sin contrarrevolución, de la misma manera que no hay avance constitucional sin estatuas que se aferren al viejo pedestal con maneras de granito y mármol.

El signo progresista o reaccionario de los tiempos tendrá que ver con la correlación de fuerzas. El "no se puede", "vas a empeorarlo" y "vas a frenar otros avances", argumento tradicional de "la retórica de la reacción" (analizada en el trabajo ya clásico de Albert Hirschmann), nos lo encontramos ahora repetido, con la vulgaridad propia de la época, en un "no se puede", "no hay consenso social" o "a nadie le interesa". Si alguien añora sabores locales, añadamos que estará aderezado puntualmente con la salsa nacional del "perjudica la salida de la crisis" o "esos que buscan cambiar la Constitución en verdad son antiespañoles". Le corresponderá a la correlación de fuerzas decantar qué apoyos recibe la "revolución" (entendiéndola como una gradación, desde el cambio mínimo a la transformación profunda de las estructuras) o la contrarrevolución. En el siglo XIX, la reacción tenía cañones. Hoy tiene medios de comunicación. Fue Luis Napoleón Bonaparte quien enseñó al conservadurismo europeo que no hacía falta oponerse al sufragio universal toda vez que era posible convencer a los pobres de que votaran a los que se quedaban con la riqueza que ellos producían.

La historia está llena de víctimas que ensalzaron a los verdugos. El hacha de los recortes está afilada en la España de Rajoy con los votos de los que ven mermadas sus pensiones, su acceso a la educación o la sanidad, su posibilidad de encontrar un trabajo o sus esperanzas de recibir cualquier ayuda pública. Y también por el contundente apoyo de esa mayoría silenciosa que le ayuda al segundo plato de Aznar, el inefable registrador de la propiedad Mariano Rajoy, a fumarse todos los días y con paz de obispo un puro con vitola visigoda.

Durante tres décadas nos dijeron que la Constitución no se podía tocar. El demiurgo del Tribunal Constitucional, Francisco Rubio Llorente, fue insistente en la necesidad de "no abrir el melón constitucional". Ha repetido esa cantinela cada vez que surgía alguna demanda social en esa dirección. Cuando el PP y el PSOE cambiaron el artículo 135 con nocturnidad, alevosía y agosticidad (Enrique Santiago dixit) con el fin de otorgar primacía al pago de la deuda por encima del gasto social (ese que viene definido en el artículo 1 de la Constitución), el actual  presidente del Consejo de Estado y otrora vicepresidente del Tribunal Constitucional, afirmaría que quien manda no es el soberano, sino las circunstancias, de manera que no resultaba conveniente "correr el riesgo" de hacer pregunta alguna.¿El riesgo de qué? Pues de convocar al pueblo para opinar sobre esa primacía dada a deudas que buenamente podrían entender, al menos en parte, como ilegítimas. Si ésta es la opinión de la socialdemocracia ¿qué puede esperarse de los que siempre se encontraron a gusto en el franquismo?

Nunca una celebración de la Constitución ha sido desde su aprobación en 1978 más patética que la de este 2012. No solamente por la deriva identitaria de Cataluña, comprensible solamente por la irresponsabilidad histórica de las derechas ibéricas –incluida la catalana– y por el duelo entre dos inútiles, Rajoy y Mas, que prefieren desviar la atención a las cuestiones del hígado nacionalista antes que enfrentar su insano desatino en el tratamiento de la economía. Nunca desde su aprobación en 1978,  la Constitución ha estado más desvirtuada. Los magros canapés de la celebración no alimentan el hambre acumulada.

Constitución desvirtuada porque sin división de poderes no hay democracia. La justicia en España ya no está garantizada. Pese a que, según el artículo 24, se garantizará la tutela efectiva de los jueces, las altas tasas judiciales aprobadas recientemente por el PP, la inmunidad de ricos y políticos que logran que sus delitos prescriban, la incapacidad de los jueces para perseguir de oficio los delitos de cuello blanco o las tropelías de los gobiernos, la lentitud de la justicia, la politización de los órganos de gobierno judicial y, por supuesto, el origen franquista de buena parte de los jueces (que llega hasta jueces para la democracia), hacen del artículo 24 papel mojado. Si los jueces no sirven para frenar el desorden de los poderosos ¿quién persigue el incumplimiento de las leyes? Podríamos decir: el 15M , la calle, rodear el Congreso. A todas luces, movilizaciones esenciales pero todavía insuficientes. Expresan el descontento pero no identifican todavía un nuevo instrumento político. La desvirtuación de la justicia dinamita el artículo 14 y la supuesta igualdad de los españoles. Y si no somos iguales, el pacto social de convivencia queda roto.

Se ha vaciado la Constitución, igualmente, al vaciarse la tarea redistribuidora de la seguridad social. se ha vaciado al no garantizarse el derecho al trabajo ni a una vivienda digna, ni a la educación, ni a un sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con la capacidad económica de cada cual, ni al derecho a remuneración en caso de desempleo, ni al derecho de reunión, ni de manifestación. Se dinamita la Constitución cuando el Rey deja de representarnos marchándose a cazar elefantes en mitad de una crisis que condena a uno de cada dos jóvenes al paro, de la misma manera que Ana Botella, alcaldesa de Madrid, incumple la Constitución al marcharse a un hotel de lujo mientras sus conciudadanas y conciudadanos están de luto porque han muerto cuatro jóvenes en una macrofiesta de dudosa legalidad. Una estaba aún luchando, al final sin éxito, por su vida. Ambos, el Rey y la alcaldesa de Madrid, incumplen con la dignidad que se exige  a sus cargos. Si pueden inventarse cargos contra jóvenes vallecanos, bien podrían los jueces perseguir delitos reales de quienes abusan de sus cargos.

Pero la Constitución no se dinamita solamente en el pasado y en el presente. Pretende dinamitarse sobre todo en el futuro. Fue este verano, en una conferencia en la FAES, cuando y donde  el ministro Wert afirmó: "La comunidad educativa no puede ser una comunidad democrática, porque el proceso educativo no es democrático". Y se puso manos a la obra, a regresar la educación española a los tiempos del franquismo y de las sotanas negras, brutales y lascivamente cariñosas, para que la ciudadanía interiorice los principios de la monarquía nacional-católica y aprenda que hay un orden divino detrás de sus miserias. Para que no haya más mareas. Para que el sentido común sea el sinsentido común que estamos viviendo.

Este 6 de diciembre, dicen (¡Viva la Juana!), que hubo gente celebrando el aniversario de la Constitución española de 1978. La del reinado de Juan Carlos I. Y el pueblo sin enterarse.

Juan Carlos Monedero es profesor titular de Ciencia Política y de la Administración en la Universidad Complutense de Madrid y director del Departamento de Gobierno, Políticas Públicas y Ciudadanía en el Instituto Complutense de Estudios Internacionales.

ESPAÑA, CORTIJO DEL PP

(ATTAC España, 11/12/2012)


Rosa María Artal – Comité de Apoyo de ATTAC España

Es cierto que les votaron 10.830.693 personas, el 30,2% de los electores, pero el PP cuenta con unos 800.000 afiliados y, de ellos, no serán más de un millar los que poseen capacidad de gestión. La bendita democracia, dicen, que ha otorgado un poder omnímodo a un partido aunque se haya basado en mentiras para alcanzarlo. Como que iba a solucionar la crisis y el paro, por ejemplo, cuando los ha acrecentado. Y eso al parecer no tiene consecuencias. Esperar 3 años más y sin exigir responsabilidades. Algo falla aquí ¿no?

El caso es que tenemos a un exiguo grupo que solo demuestra eficacia en haber convertido de nuevo España en su cortijo, como hicieron sus ancestros.

Cada mañana trae novedades que, no por esperadas, dejan de soliviantarnos. El Ministro Wert actúa de elemento de distracción al provocar innecesariamente a Cataluña con su nueva ley de "educación" y calentar al ultranacionalismo español de paso. Ha generado un problema donde no lo había. Entiendo la indignación en esa comunidad pero tan grave o más es que el tertuliano venido a más devuelve la enseñanza a tiempos muy remotos, incluso del franquismo. Acaba con Educación para la Ciudadanía que, recomendación del Consejo de Europa, imparten sin problemas en todo el continente, incluso en colegios religiosos. También con Ciencias para el Mundo Contemporáneo que se ha contado menos pero era materia decisiva. Vuelve a imponer la religión y la segregación de sexos. En general, acaba con cuanto sea innovación y formación del sentido crítico. La jerarquía eclesiástica católica -en sus horas más bajas- ha ganado la partida según nos cuenta el indignado artículo de uno de mis más antiguos y queridos amigos: Juan González Bedoya. Analfabetismo religioso, lo llama.

El resto de la casta tampoco se queda atrás. El Gobierno balear despedirá o cambiará de isla a los profesores que expliquen a los niños los recortes.  No lo considera educación, sino "opiniones" políticas.  Un tema gravísimo también.

El empecinamiento en destruir la sanidad pública es parejo. Nada puede con el decidido propósito de depositar nuestra salud en manos de empresas privadas ávidas de lucro. Hasta con presiones que apenas entendería la lógica de no ser que escondan muy oscuros intereses. Y con las habituales mentiras, como la de engañar con el costo del servicio. Siguen en huelga sus profesionales. Perdiendo dinero y ánimo ante la impotencia de un maquiavélico plan que continúa adelante. Se comete la barbaridad de cerrar el Instituto de Cardiología, va a ser el primero, y sigue el goteo de despidos. La salud el primer bien que poseemos.

Mientras, corren buenos tiempos para el "sector del lujo", y en noticia de ABC, hablan de 17 años más para recuperar el empleo, hasta 2022. Se ve que el periódico conservador confía poco en la capacidad de relacionar conceptos de sus lectores. Debe tener razón el estudio, es un año menos de lo que nos da el FMI que lo cifra en 2023. Y De Guindos sigue hablando de "crecimiento negativo" y de que éste va a ser el peor trimestre de la recesión. Hasta ahora, quiere decir. Lo que viene, por este camino, es negro.

Y nos falta aún otro gran pilar de la sociedad: la justicia. Ya no es sólo que este gobierno amnistíe torturadores contra viento y marea, o que haya convertido en delito casi todo -en particular las protestas ciudadanas- o que haya subido las tasas para que solo pueda acceder a un servicio fundamental del Estado de Derecho quien tenga dinero, la guinda la ha puesto otra novedad que paso a relataros. Me habían avisado, pero no podía creer que llegara a tanto la desfachatez de este gobierno.

Se privatiza el Registro Civil y pasa a manos… de ¡los Registradores de la Propiedad!, el cuerpo profesional al que pertenece Mariano Rajoy Brey, aún titular de Santa Pola. Considerado anacrónico en toda Europa como ya hemos hablado aquí otras veces, el dueño del cortijo y sus ejecutores deciden potenciar a los Registradores para que cobren aún por más servicios. En el resto de los países de nuestro entorno son gratuitos. Solo una ciudadanía en Babia puede engullir esto.

No se puede llegar a más ¿no? me temo que la apisonadora es imparable, y sí puede llegar a más, hasta donde quieran.  Y no se entiende. Repito las cifras con las que empezaba. La definitiva: unos pocos ultraconservadores desaprensivos están destruyendo cuanto teníamos y era base de nuestra convivencia. El cortijo, amos, criados sin derechos. ¿De verdad querían esto 10 millones de votantes, al margen de los que viven de ello?

EL DIRECTOR GENERAL DE LA FAO: CAMBIAR CÓMO PRODUCIMOS Y CÓMO CONSUMIMOS

(3500 Millones, 11/12/2012)


Esta entrada ha sido escrita por José Graziano da Silva, Director General de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que ayer inauguró en Córdoba el seminario internacional Cultivos del pasado y nuevos cultivos para afrontar los retos del siglo XXI. Con él continuamos una serie de entradas que, a lo largo de la semana, explicarán la oportunidad de estos cultivos en la lucha contra el hambre y el cambio climático.
Screen Shot 2012-12-06 at 10.50.38 PM
Campesinos en Burundi. Fotografía: FAO


En la actualidad hay unos más de 868 millones de personas con desnutrición crónica en el mundo. Y hoy la gran mayoría de la población basa su dieta en solamente cuatro cultivos: el arroz, el maíz, el trigo, y las patatas. La globalización de los mercados ha creado una abundancia de alimentos en algunas partes del mundo, pero también  ha causado una escasez de alimentos en otras. Al mismo tiempo ha creado una cierta homogeneidad de productos, perdiendo la riqueza de distintas culturas culinarias, y de la biodiversidad que ha sostenido una larga lucha para mantener la diversidad cultural y tradicional. 

Los estudiosos estiman que alrededor de 7,000 especies de plantas se han cultivado o consumido como alimento a lo largo de la historia. En la actualidad, muchas de estas especies se están desapareciendo y con ellas su diversidad genética. Si perdemos estos recursos únicos e irremplazables, nos será más difícil adaptarnos  al cambio climático o garantizar una alimentación sana y diversificada para todos.Nuestra dependencia calórica en los cuatro cultivos de base y el esfuerzo para aumentar la producción mundial desde los años 60, durante lo que se conoce como la Revolución Verde, nos ha llevado hacia el monocultivo y al uso intensivo de insumos químicos y recursos naturales. Ahora, estamos sufriendo las consecuencias de la destrucción de ecosistemas. El enfoque del sector agrario en pocos productos (de alimentos básicos o productos destinados a la exportación) reduce, en consecuencia, la diversidad alimentaria. Y si  la dieta se basa en pocos cultivos, crece el riesgo de deficiencia de micronutrientes. Si se combina con el consumo excesivo de energía, resultan altas prevalencias de enfermedades crónicas no transferibles, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.

Rumbo a la consecución de los compromisos asumidos en la Conferencia Río+20, nuestro esfuerzo tiene que avanzar hacia un desarrollo sostenible. Por eso, la manera cómo producimos y cómo consumimos reviste gran importancia.

La FAO promueve la intensificación sostenible de la producción agrícola, que resumimos en la expresión "Ahorrar para Crecer". La intensificación sostenible consiste en una agricultura productiva que conserva y mejora los recursos naturales. Emplea un enfoque ecosistémico que se basa en la contribución de la naturaleza al crecimiento de los cultivos y aplica insumos externos apropiados en el momento preciso y en la cantidad adecuada. Igualmente, se requieren cultivos y variedades mejor adaptados a las prácticas productivas basadas en el ecosistema, que los disponibles en la actualidad, diseñados para la agricultura que requiere una gran cantidad de insumos. El uso selectivo de insumos externos supondrá que las plantas tendrán que ser más productivas, emplear los nutrientes y el agua de manera más eficiente, ser más resistentes a las plagas de insectos y las enfermedades y ser más tolerantes a la sequía, las inundaciones, la helada y las temperaturas más altas. Las variedades empleadas en la intensificación sostenible de la producción agrícola deberán adaptarse a las zonas y los sistemas productivos menos favorecidos y tendrán que producir alimentos con un valor nutricional más elevado y con propiedades organolépticas deseables y ayudar a mejorar la provisión de servicios ecosistémicos. 

En este contexto, las especies olvidadas e infrautilizadas desempeñan un papel crucial en la lucha contra el hambre y constituyen un recurso clave para el desarrollo agrícola y rural. Los cultivos indígenas se adaptan mejor ecológicamente y ofrecen un amplio valor nutricional. Sin embargo, el enfoque de investigación científico se ha centrado en el mejoramiento de un número demasiado reducido de cultivos, u otros cultivos seleccionados por motivos comerciales. Hoy día, existe una gran necesidad de conservar las especies olvidadas e infrautilizadas para que no las perdamos, y mejorar los cultivos indígenas que son importantes para las culturas y para el mejoramiento del estado nutricional de la población. Junto con las instituciones internacionales y nacionales, existe la capacidad de hacer investigación sobre el mejoramiento de los cultivos infrautilizados. Hemos dado los primeros pasos pero queda aún un largo camino por recorrer. Es necesario fortalecer las políticas e instrumentos internacionales para la conservación y el uso sostenible de los cultivos olvidados, teniendo en cuenta tanto los desafíos del hambre como los de una alimentación cada vez más sana. Es necesario generar mayor conciencia del valor y del potencial que tienen para la seguridad alimentaria mundial los cultivos infrautilizados a nivel local y regional. Hay que facilitar un mayor intercambio de  estos cultivos entre los países para favorecer la investigación y, al mismo tiempo, tener en cuenta el reparto justo y equitativo de los beneficios derivados de la misma. Es imperativo un diálogo entre los países encaminado a rescatar a estos cultivos olvidados para que no perdamos la riqueza ni la sabiduría de nuestros antepasados, para que podamos aprender de ellos. Una mayor diversidad de cultivos hará menos arduo el reto de alimentar al mundo.

FIESTA-ENCUENTRO DEL LANZAMIENTO DE LA NUEVA WEB DEL PERIÓDICO DIAGONAL

(Madrilonia, 10/12/2012)


¡Diagonal estrena nueva web y queremos celebrarlo contigo!

Por eso te invitamos a la:
Fiesta-encuentro de lanzamiento de la nueva web del periódico Diagonal
Viernes 14 de diciembre en el Patio Maravillas
C/ Pez 21 <M> Noviciado- MADRID


19h – 21h. Encuentro con colaboradores
(presentación de la web + introducción a redacción web y periodística + funcionamiento interno de Diagonal en materia de contenidos + tapas entre diagonales).
 

21h – 24h. Sesión musical a cargo de Patty Hearst + proyecciones + sorpresas que te-van-a-en-can-tar

Nuestra nueva web ha sido posible gracias a las 566 personas que apostaron por ella en una campaña de financiación colectiva (crowdfunding). Y a las más de 5.400 personas suscritas al periódico. Y también, a las muchas que colaboran desinteresadamente con el proyecto, que aportan textos, fotografías, ilustraciones y vídeos tanto para las ediciones online y en papel, o que participan en otros trabajos que hace sostenible DIAGONAL.

Tras un largo proceso de elaboración, y gracias al trabajo de las compañeras de H Disseny con el gestor de contenidos Drupal, la nueva web nos permitirá informar mejor, con más opciones para la participación, nuevos espacios multimedia, blogs y un archivo de la edición impresa en PDF. Como siempre, todos los contenidos se compartirán bajo licencia libre (Creative Commons by-SA).

El 14 de diciembre queremos saber tu opinión, explicarte en persona cómo va a funcionar diagonalperiodico.net, invitarte a participar en este nuevo medio digital, y seguir tejiendo redes que hacen posible este proyecto de comunicación crítica e independiente, sin jefes ni publicidad de grandes empresas. El encuentro se concluirá con unas tapitas entre diagonales. Luego será la fiesta ¡Esperamos verte!
Un abrazo del colectivo editor
DIAGONAL

LOS DERECHOS HUMANOS ANTE LAS CRISIS CAPITALISTAS

(ATTAC España , 10/12/2012)


Guillermo García — Doctor en Derecho, especializado en derechos humanos y desarrollo
El conjunto de los derechos humanos no es inmutable ni se establece de una vez para siempre, sino que posee una dimensión y un carácter históricos, por lo que a través del tiempo se producen modificaciones e innovaciones en su concepción, interpretación y aplicación. De este modo, reflejan el grado de conciencia y de consenso logrados en un momento determinado, dando respuesta a una problemática y unas circunstancias históricas concretas, en torno al ideal de justicia social. En este sentido, las generaciones de derechos humanos constituyen no sólo nuevos derechos reconocidos, sino también etapas o fases históricas en cuanto a la manera de concebir, interpretar y aplicar los derechos hasta entonces reconocidos. Así, por ejemplo, en lo que se refiere al hecho de incluir entre los derechos de primera generación a los derechos políticos, lo cierto es que derechos como el sufragio universal no sólo masculino, sino también femenino, no han sido reconocidos en muchos textos constitucionales hasta bien entrado el siglo XX. Sin embargo, la principal cuestión que se plantea aquí y ahora es: ¿pueden los derechos humanos hacer frente al capitalismo y sus crisis? Más aún: ¿son compatibles dichos derechos con el régimen económico actualmente imperante?
Las "generaciones" de derechos humanos
Se suelen citar como derechos de primera generación a los derechos civiles y políticos, o derechos de libertad, por ser principalmente de esta naturaleza los derechos proclamados en las primeras declaraciones de derechos humanos, entonces también denominados derechos "naturales". Son derechos proclamados frente a los regímenes despóticos y monárquicos. Así, por ejemplo, el inicial y parcial reconocimiento de la libertad de cultos fue en principio decisivo para acabar con las guerras que tomaron como pretexto la religión en la Europa renacentista. Sin embargo, en el fondo subyacían las reivindicaciones de la burguesía emergente frente a las trabas al libre comercio procedentes de los regímenes estamentales y semifeudales que se remontaban a la Edad Media, destacando el "sagrado" derecho a la propiedad privada.

Según las doctrinas liberales, dichos derechos exigen sobre todo la abstención por parte de los poderes públicos, sin embargo, una reflexión más atenta deja entrever que esta "abstención" es una más de las falacias de las ideologías liberales y neoliberales para tratar de legitimar el régimen económico fomentado por los burgueses, es decir, el capitalismo, presentándolo no como tal, sino como "democracia" y "Estado de Derecho". De este modo, los regímenes capitalistas se van imponiendo inicialmente por Europa y América, a la par que la denominada "modernidad". En su versión más democrática, los derechos civiles y políticos son oponibles a los poderes públicos y privados, así como a otros individuos, con el fin de hacer respetar la autonomía individual de cada cual.

Los derechos de segunda generación, en cambio, sí exigen claramente de los poderes públicos su intervención, con objeto de que los individuos, particularmente los más pobres y desfavorecidos, puedan hacer efectivos sus derechos, dado que carecen de medios y recursos para lograrlo por sí solos. Son los denominados derechos económicos, sociales y culturales, o derechos de igualdad, que fueron surgiendo a lo largo de los siglos XIX y XX impulsados por las luchas obreras frente a las duras condiciones laborales impuestas por la burguesía capitalista. Su plasmación incipiente en textos legales puede observarse, por ejemplo, con motivo de la revolución de 1848 en Francia o el reconocimiento de determinados seguros sociales en la Alemania de finales del siglo XIX. Sin embargo, fueron la revoluciones soviética y mejicana, a principios del siglo XX, los acontecimientos decisivos para que estos derechos comenzaran a ser reconocidos en diferentes constituciones y ordenamientos jurídicos de distintos países.

Por su parte, los derechos humanos de tercera generación también han surgido tras la toma de conciencia y la movilización para lograr una mejor calidad de vida y un mayor bienestar, así como para fortalecer la convivencia pacífica. Se trata del derecho de los pueblos a autodeterminarse, frente al colonialismo y al neocolonialismo (neoliberalismo); del derecho a la paz, contra la guerra; del desarrollo para todos, contra la pobreza; de la asistencia humanitaria en cualquier parte del mundo ante situaciones de extrema gravedad (catástrofes, conflictos bélicos, etc.); de un medio ambiente sano frente al deterioro grave de nuestro entorno natural, así como de la existencia de un patrimonio común de la Humanidad, natural e histórico, que debe preservarse. Se suele decir que los derechos de tercera generación hacen hincapié en la necesaria solidaridad o fraternidad que debe existir entre los seres humanos para hacer respetar y proteger los valores y aspiraciones que se consideran comunes a todos, es decir, universales.

En este sentido, en mi opinión, las características específicas señaladas para las distintas generaciones de derechos humanos, es decir, la "oponibilidad" para los derechos de la primera generación (civiles y políticos), la "exigibilidad" para los de la segunda (derechos económicos, sociales y culturales), y la "solidaridad" para los de la tercera confluyen en las tres generaciones. Es decir, todos los derechos humanos son oponibles, exigibles y requieren de la solidaridad y de la cooperación para hacerlos efectivos. De este modo, lo singular de cada una de las generaciones de derechos humanos no es solamente la incorporación de nuevos derechos, sino también la incorporación de nuevos modos de concebir, interpretar y aplicar tanto los nuevos derechos como los tradicionales. Así, por ejemplo, los derechos civiles y políticos (primera generación) no deben interpretarse y aplicarse de manera individualista y exclusivista, tal y como plantean las doctrinas liberales clásicas y neoliberales, sino que deben ser compatibles con los derechos de segunda (derechos económicos, sociales y culturales) y de tercera generación (derecho a la autodeterminación, a la paz, al desarrollo, a un medio ambiente sano y al patrimonio común de la humanidad).

Por esta razón, los derechos civiles y políticos no requieren solamente la "abstención" de los poderes públicos, pues entonces sólo podrían hacerlos efectivos aquellos titulares que posean recursos suficientes para hacer valer por sí solos tales derechos, sino que también requieren la intervención de los poderes públicos en aquellos casos en que sus titulares carezcan de dichos recursos. Es el caso, por ejemplo, del derecho de tutela judicial, el cual cada vez es más evidente que sólo los más privilegiados pueden hacerlo valer de manera efectiva, por medio de un asesoramiento jurídico cada vez más especializado y costoso. Las disposiciones legales en materia de "abogados de oficio" o de "costas judiciales" son notoriamente insuficientes y los recursos presupuestarios asignados para ello más insuficientes aún. Además, son escasos los jueces sensibles a esta situación. Consecuencia de ello es que mientras quien tiene sobrados motivos para recurrir a la justicia no puede hacerlo en muchas ocasiones por falta de recursos, en cambio, los más privilegiados no dudan en hacerlo con motivo o sin él.

Por otra parte, para reivindicar y hacer valer los derechos económicos, sociales y culturales es necesario ejercer determinados derechos y libertades fundamentales que se ubican entre los derechos civiles y políticos, como la libertad de pensamiento, de opinión, de expresión, de reunión, de asociación, etc., lo que implica que los poderes públicos deben abstenerse de impedir el ejercicio de tales derechos aunque sí es exigible que intervengan para que otros individuos o grupos no lo impidan. Los individuos y grupos que configuran una comunidad organizada deben contribuir solidariamente, según las posibilidades y recursos de cada cual, con el fin de establecer unos poderes públicos con medios y recursos suficientes para hacer efectivos los derechos humanos para todos de manera equitativa.

La libertad, la igualdad y la solidaridad son conceptos entrelazados e interdependientes en la medida en que no se pueden entender ni hacer realidad cualquiera de ellos aisladamente, es decir, sin tener en cuenta los otros. Pretender lo contrario, es decir, interpretar antagónicamente uno de ellos respecto de los otros (por ejemplo: la libertad contra la igualdad y la solidaridad) constituye una de las características de las doctrinas liberales y neoliberales de los derechos. Así, mientras una minoría privilegiada pregona las excelencias de la libertad individual, principalmente la de enriquecerse sin límites, otra parte de la humanidad, mucho más numerosa, carece de lo más mínimo para poder vivir dignamente. De ahí la pertinencia de postular las características de cada una de las generaciones de derechos humanos como propias de todos los derechos humanos.

La actual crisis del capitalismo
Las espasmódicas y recurrentes crisis que acompañan a los procesos de acumulación de capital desde los inicios históricos del capitalismo siempre han repercutido sus peores consecuencias en las poblaciones más desfavorecidas e indefensas: paro y precariedad laborales, aumento de las desigualdades económicas y sociales, empobrecimiento, etc. La aguda crisis actual en los países ricos no es una excepción y ha puesto en evidencia las consecuencias previsibles, pero negligentemente ignoradas, de la excesiva especulación financiera por parte de los bancos y empresas transnacionales privadas, quienes en connivencia con muchos dirigentes estatales y gubernamentales, una vez más, han evitado su colapso mediante la expropiación de cuantiosos fondos del sector que consideran "obsoleto", el sector público, sin reconocer el fracaso de las medidas pro sector privado que han impuesto y siguen imponiendo bajo la estela de uno de las nociones emblema de la globalización neoliberal: la gobernanza1. De este modo, aseguran la continuidad de las formas de dominación neocoloniales por todo el planeta.

Dicha crisis tiene como epicentro el mundo financiero y repercute en todos los ámbitos económicos y sociales. Afecta de lleno al núcleo de las fuerzas dominantes de la metrópoli capitalista, donde se ubican los grupos hegemónicos del sistema económico mundial. En efecto, se trata de una crisis financiera cuyas causas tienen mucho que ver con la actividad predominantemente especulativa a la que se dedican los grandes bancos y empresas transnacionales de los países ricos, facilitada por uno de los emblemas de la globalización neoliberal, es decir, la libertad de circulación de capitales y la consiguiente "financiarización" de la economía. De este modo, el desmesurado incremento de capital en circulación no se corresponde en absoluto con la economía real o productiva.

En lo que se refiere a los países empobrecidos del Tercer Mundo, dicha libertad de circulación de capitales favorece todo tipo de capitales especulativos dispuestos a abandonar los países de "alto riesgo" (es decir, los más empobrecidos) con la misma rapidez que entraron, es decir, a la mínima señal de "alarma", hundiendo aún más en la miseria a los más pobres. Esto sucedió en el decenio de los noventa en los países entonces denominados "tigres asiáticos" (Tailandia, Indonesia, Taiwán, Corea, etc.), elogiados desde la metrópoli como modelo de crecimiento económico y "prueba" del éxito de las políticas neoliberales. Dicha crisis se simultaneó con otras similares en América Latina (México, Brasil, Argentina) y en países como Rusia y Turquía, ante la pasividad y complicidad de las instituciones financieras internacionales (FMI, Banco Mundial).

En cualquier caso, las crisis periódicas y repetitivas del capitalismo se suceden cíclicamente y le son consustanciales. Ahora le ha tocado el turno a la "metrópoli". Por su propia naturaleza, el capital privado "financiarizado" se inclina por la mayor rentabilidad en el menor plazo y por la garantía de que las ganancias así obtenidas sean "repatriadas" a sus lugares de origen en vez de reinvertirse allá donde se obtuvieron dichas ganancias. Paradójicamente, quienes tanto abogan por reducir los gastos sociales y por la disminución de la intervención de los poderes públicos con fines redistributivos se encuentran ahora con los bolsillos repletos de dinero público gracias a decisiones de dirigentes políticos que, una vez más, obedecen a quienes realmente les han colocado en dicho puesto. Si se hubieran aplicado a sí mismos las normas "gobernancistas" que tanto han promovido y preconizado los bancos y las empresas transnacionales para los menos "competitivos", pura y simplemente hubieran desaparecido por "incompetentes".

En definitiva, la correlación de fuerzas actual permite a los más ricos y poderosos no solo pasar la factura de la crisis a los que menos culpa tienen, sino que dicha crisis sirve de pretexto para acelerar y profundizar las contrarreformas neoliberales2. Dichas contrarreformas consisten básicamente en mermar y erosionar paulatinamente el estado de bienestar y los avances y derechos sociales logrados tras la II Guerra Mundial mediante políticas económicas redistributivas de corte keynesiano, aunque siempre sometidas a relaciones de producción, comercio y consumo capitalistas.

A ello hay que añadir el imprescindible componente militar que acompaña y hace posible la actual globalización o mundialización (imperialismo neocolonial) del capitalismo neoliberal, es decir, una potente industria militar que nutre permanentemente a unos ejércitos dispuestos a guerrear en todo momento en cualquier parte del mundo, tanto porque es uno de los negocios más lucrativos3 como porque es la manera de imponer un régimen económico como el capitalismo, así como sus derivados imperiales y coloniales, a todos los pueblos del mundo al margen de su voluntad soberana. De hecho, el presupuesto de "defensa" de EE.UU., potencia militar dominante del mundo actual, con una enorme ventaja sobre el resto, y principal promotor de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), principales "interventores" militares en el planeta, aumentó desde unos 300.000.000.000 de dólares en el año 2000 a más de 700.000.000.000 en 2009, manteniéndose en 2012 dicha cifra a pesar de la profunda crisis económica en dicho país. Paralelamente, el coste de las operaciones de la OTAN desde 2005 se han cuatriplicado.

Conclusión
En un mundo como el actual resulta pertinente reivindicar políticas económicas que permitan hacer efectivos todos los derechos humanos y para todos, en particular para los más vulnerables y desfavorecidos. Ello exige nuevas maneras de organizarse y comunicarse más democráticas, alternativas y capaces de hacer frente a las gigantescas burocracias más "verticalizadas" que centralizadas en los ámbitos empresariales, sindicales, partidistas y mediáticos, y que hegemonizan el régimen político y económico actual, subordinado en su conjunto a los intereses del capitalismo transnacional globalizado. Es decir, se trata de fomentar la movilización de la sociedad desde su base, con el fin de crear la fuerza social que permita promover políticas alternativas al capitalismo y a sus derivados imperiales, coloniales y neocoloniales (neoliberales), así como potenciar organizaciones democráticas, plurales, diversas y alternativas a las burocracias paralizantes y sumisas al capital.

Publicado en "Papeles de relaciones ecosociales y cambio global".
_____
Notas
(1) Véase "Gobernanza y crisis del neoliberalismo" de Nicolás ANGULO SÁNCHEZ en la revista Entelequia n° 11 (primavera de 2010), pp. 241259. Enlace: http://www.eumed.net/entelequia/pdf/2010/e11a13.pdf.
(2) Véase del autor "Crisis y contrarreformas neoliberales" en Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas, 33 (2012.1). Enlace: http://www.ucm.es/info/nomadas/33/guillermogarcia.pdf.
(3) En 2009, la venta de armas en el mundo alcanzó la cifra de 401.000.000.000 de dólares EE.UU., excluyendo China y las empresas de Kazajstán y de Ucrania, que no suministran datos al respecto, según el Instituto Internacional de Investigación sobre la Paz de Estocolmo (SIPRI). Entre las diez primeras empresas vendedoras de armas se encuentran siete estadounidenses.